Los lugares de culto son donde la gente va para sanar, reflexionar y respetarse mutuamente. Iglesia, mezquita, sinagoga, no importa. Gritar lenguaje vil fuera de cualquiera de ellos no es "protesta", es profanación. Muestra lo enfermos y deformes que se han vuelto estos agitadores. Cuando vuelva a Nueva York, pararé en Park East para mostrar mi apoyo. Judíos y no judíos deberían hacer lo mismo. Reza por nuestra ciudad. Hoy es una sinagoga. Mañana es una iglesia o una mezquita. Hoy vienen a por mí y a ti mañana. No podemos entregar esta ciudad a radicales.