la mayor parte del marketing profesional está optimizado para la política interna, la facturación de agencias y el mantenimiento de narrativas ante la alta dirección, exhibiendo métricas de vanidad, en lugar de impulsar resultados comerciales. por eso el 80% de los ceos han perdido la confianza en sus cmos[1], y los cmos tienen la mayor rotación entre el c-suite[2]. los mejores marketers realmente ven a través de esto y hacen un esfuerzo por distinguirse como un socio estratégico para el equipo de negocios. está bien - podemos hacer una broma autocrítica sobre una industria que tiene problemas para mantenerse relevante porque es en gran medida egoísta - así que realmente podemos hacer un trabajo que importa.

[1] [2]